“A la sombra de tus alas cantaré, porque tú eres mi ayuda.”
– El Señor está aquí y ahora, para ser tu Ayuda y tu Guía.
– Tienes una razón para regocijarte y estar complacido, porque Él está contigo.
– El Señor te ha ayudado hasta ahora, entonces confía para el futuro.
– Descansa con seguridad y alegría bajo la protección del Altísimo.
Oración: Señor, verdaderamente, Tú eres mi ayuda. Todavía creo y confío en Tus planes y coloco mi corazón en Tus manos. Tú eres todo lo que necesito y pongo mi confianza en Ti mi Fiel Amigo. Amén.