“Cuando yo te pida ayuda, huirán mis enemigos. Una cosa sé: ¡Dios está de mi parte!”
– Puedes estar seguro de que Dios está de tu parte.
– Cuando confías en ël, tus enemigos huirán y desaparecerán.
– Porque el Señor es tu escudo y tu gloria, y es quien levanta tu cabeza.
– Cree que Él está de tu lado y dale tus peticiones.
Oración: Señor, creo que Tú estás de mi lado. Tú estás para mí y no en mi contra. Tú me amas y no me condenas. Tú escuchas mi llamado y me darás la victoria. Amén.