“¡Que el Señor te recompense por lo que has hecho! Que el Señor, Dios de Israel, bajo cuyas alas has venido a refugiarte, te lo pague con creces.”
– ¿Dónde estás encontrando refugio?
– Él lugar más seguro que podríamos encontrar es bajo Sus alas.
– Él es nuestro refugio y nuestra fortaleza.
– Apártate de tus propios lugares seguros y ven bajo Sus alas.
Oración: Señor, he venido a encontrar refugio bajo tus alas. Me pongo con seguridad y confianza bajo tu sombra protectora. Amén.