“ Entonces quitaron la piedra. Jesús, alzando la vista, dijo:—Padre, te doy gracias porque me has escuchado.”
– Cuando invocamos al Señor, podemos saber que Él escucha nuestro clamor.
– Nuestro Salvador tenía plena confianza en Su Padre.
– Puedes tener plena confianza en tu Padre Celestial.
– Tú también puedes decir: “Padre, te doy gracias porque me has escuchado”.
Oración: Señor, te miro y te agradezco que hayas escuchado mi clamor. Tú dirigirás mi paso y me guiarás, me guiarás y me tomarás de la mano. Amén.