“Cuando llegó a cierto lugar, se detuvo para pasar la noche, porque ya estaba anocheciendo. Tomó una piedra, la usó como almohada, y se acostó a dormir en ese lugar.”
– Encontrarse en una situación difícil no es un desafío para Dios.
– Él puede encontrarse contigo justo donde estás y puede cambiar tu vida.
– Él puede convertir tu “lugar duro” en un lugar de encuentro con Él.
– Entrégale a Dios tus desafíos y ve lo que Él hará con ellos.
Oración: Señor, cuán agradecido estoy de que me conozcas y conozcas lo que me pasa. Sé que puedes encontrarme justo donde estoy, y puedes tocarme y cambiarme a mí y a mi situación. Amén.