“¿Por qué estás haciendo esto solo…?”
– A menudo, en la vida, terminamos tratando de manejar todo nosotros mismos.
– Creemos que tenemos “hombros anchos” y por eso llevamos un peso innecesario.
– Hay otros que pueden ayudarte en el camino si lo pides.
– El Señor también es tu Ayuda y puedes confiar en Él.
Oración: Señor, perdóname por siempre tratar de llevar todo con mis propias fuerzas. Necesito la ayuda de los demás, y especialmente, la ayuda que viene de Ti. Te llamo y te pido que seas mi Ayuda, y me rodees de otros que también me ayudarán. Amén.