“Él nos libró del dominio de la oscuridad y nos trasladó al reino de su amado Hijo.”
– Como hijos de Dios, vivimos completamente en otra dimensión.
– Hemos sido rescatados, liberados y transferidos de la oscuridad a Su luz.
– Por eso, ahora podemos vivir como hijos de la luz.
– Aléjate de la oscuridad, camina y abraza Su luz en tu vida.
Oración: Señor, gracias por el maravilloso trabajo que has hecho en mi vida. Ayúdame a caminar en Tu luz y que la oscuridad no tanga ya lugar en mi vida. Amén.