“En conclusión, ya sea que coman o beban o hagan cualquier otra cosa, háganlo todo para la gloria de Dios.”
– Debemos vivir nuestras vidas conscientemente y con un propósito.
– Todo lo que hacemos puede tener un propósito divino, si lo hacemos como para Dios.
– Incluso los actos más simples y las rutinas diarias pueden honrar al Señor.
– Entonces, hagas lo que hagas, hazlo de tal manera que traiga gloria a Dios.
Oración: Señor, ayúdame en la forma en que vivo mi vida, a hacer las cosas de tal manera que mis acciones y actitudes te sean agradables. Que mi vida y mi estilo de vida traigan honor y gloria a Tu gran Nombre. Amén.