“Dile que tenga cuidado y no pierda la calma…”
– En este versículo, vemos llegar la Palabra de Dios para alguien que lo necesita.
– Asimismo. La Palabra de Dios viene a ti, diciéndote que no temas.
– Cuando las cosas parecen salirse de nuestras manos, nos descorazonamos y nos paralizamos.
– Pero el Señor siempre llega a nuestras circunstancias y nos da seguridad.
Oración: Señor, gracias por tu dirección y por el aliento que me das. Co tu ayuda, no me preocuparé, no temeré y no me descorazonaré. Amén.