“Cuando siento miedo, pongo en ti mi confianza.”
– En esos momentos, cuando el miedo intenta abrumarnos, tenemos que tomar una decisión.
– Podemos ceder al miedo o podemos poner nuestra confianza en el Señor.
– El miedo no necesita tener la última palabra, el Señor siempre tiene la última palabra.
– Estate decidido a depositar tu confianza en Él, hoy y todos los días.
Oración: Señor, gracias porque no necesito temer o permitir que el miedo me domine. En cambio, puedo depositar mi esperanza y confianza en ti de manera consciente y deliberada, porque sé que nunca me fallarás. Amén.