“Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, y renueva la firmeza de mi espíritu.”
– El Señor está muy interesado en la condición de nuestros corazones.
– Los corazones endurecidos producen problemas, pero los corazones limpios producen vida.
– Permite que el Señor trabaje en tu corazón y en tu espíritu.
– Él limpiará tu corazón y renovará tu espíritu desde dentro de ti.
Oración: Señor, te entrego mi corazón y mi alma, vivo sólo para Ti. Que en cada aliento que yo tome, en cada momento que estoy despierto, Tú hagas tu voluntad en mí. Amén